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Plaza Central |
Rosa Delia Santos Fotos: Mario Urrutia
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puente Mallol |
El primer alcalde de Tegucigalpa, Juan de la Cueva, nunca se imaginó que aquella encantadora y pintoresca ciudad, se convertiría años más tarde en la zona más importante de Honduras, funcionando las principales oficinas del Estado y sector privado. Fue fundada en 1578, como centro minero, y de la Cueva fue nombrado alcalde en 1579. La población fue denominada "Real de Minas de Tegucigalpa", obteniendo el título de Villa de San Miguel de Heredia. En 1821 fue elevada al rango de ciudad. En 1824, el primer congreso de la República de Honduras decretó que las dos ciudades principales del país alternarán como capital del Estado, pero el 30 de octubre 1880 se trasladó la sede del Gobierno definitivamente a la ciudad de Tegucigalpa como capital del Estado, se decreta que residirán en ella autoridades civiles, excepto la Corte Suprema de Justicia que residirá en Comayagua. Trasladando de inmediato las oficinas dependientes del Gobierno Supremo. La ciudad estaba bellamente enclavada en una altiplanicie, a más de tres mil pies del mar, circundada por montañas de perenne verdura y regada por dos ríos, el río Grande y el Chiquito. El primero separa a las ciudades gemelas de Tegucigalpa y Comayagüela , que se comunican por un puente de mampostería de siete arcos, construido por Narciso Mallol. Desde 1898 se dispuso que las dos ciudades formasen la capital, pero manteniendo nombres separados, con dos gobiernos municipales, contando con unos 40 mil habitantes y el distrito central, incluyendo poblaciones circunvecinas, reunía más de 50 mil almas. Debido a su gran elevación sobre el nivel del mar, Tegucigalpa disfrutaba de un maravilloso clima que no era igualado por ninguna de las capitales de las Repúblicas Americanas, denotando un gran futuro como centro de turismo y sitio de recreo; sin embargo, conforme han pasado los años la capital se ve cada vez más poblada y con menos agua, producto del corte y quema inmisericorde que se realiza a diario de los bosques hondureños. Desde el punto de vista histórico, Tegucigalpa se enorgullece de haber sido la cuna de ilustres patriotas y estadistas como: Dionisio de Herrera, Francisco Morazán, José Trinidad Caballas, José Trinidad Reyes, General José Santos Guardiola, Doctor Marco Aurelio Soto, entre otros. ETIMOLOGIA DE TEGUCIGALPA
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Parque La Concordia |
La discusión que sobre el origen de la palabra Tegucigalpa ha promovido el investigador guatemalteco, señor Favio Rodas N., se han formalizado con las opiniones que a solicitud de éste acaban de formular dos hombres de estudios mexicanos, de gran reputación, los licenciados J. Ignacio Dávila Garibi y Alfredo Barrera Vásquez. Hay dos hechos importantes en este problema etimológico: el termino Togogalpa, hace referencia a "tototi", ( pájaro en náhuatl y a Toncontín, a poca distancia de Tegucigalpa señala el " toncontín", otro nahuatlismo indiscutible, que se refiere a un baile de los indios mexicanos. En México tienen la creencia de que el vocablo Tegucigalpa es de origen náhuatl, pero las etimologías que se han dado no son muy claras. Peñafiel en su nomenclatura geográfica, descomponía el nombre siguiente modo: "Tecutli- calpan", pero conforme a las reglas de la composición en náhualt, al quedar el vocablo "techaitli" subordinado al regente call debió perder el sufijo formativo, si bien en casos excepcionales se conserva éste en calidad de enlace eufónico. Adán Calanes, le escribió a Tegucigalpa, definiéndola como la ciudad extraordinaria, cuya heroica vida es legendaria. Hoy en día, la hermosa capital de Honduras ha perdido no sólo su clima fresco, sino la belleza de algunos edificios que durante años fueron orgullo de sus habitantes y la envidia de extranjeros. |
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